Da miedo que no haya de Terror

¿Cuándo fue la última vez que sintieron deseos de gritar en la sala del cine? ¿Recuerdan ese sentimiento de ansiedad al ver una película de terror? Estas incógnitas las lanzo al aire puesto que estamos en un momento muy triste del cine de terror. ¿Por qué? Pues porque lamentablemente las compañías cinematográficas consider

an el cine de miedo simplemente una posibilidad de franquicia y producen cintas con bajo presupuesto, y en su mayoría, actores semidesconocidos.

El género de terror era un área en la que se podían trabajar muchas cosas, en la que jugabas con uno de los sentimientos más poderosas del hombre, podían influir en cuestiones incluso sociales. Puedo asegurarles que hoy en día tenemos personajes como La niña del exorcista, el payaso eso, etc. Que han llegado para quedarse en la cultura popular mundial.

¿Hoy en día que personajes han logrado un impacto de ese tipo en el cine de terror? Casi ninguno, si acaso Anabelle en últimas fechas, quien brillo más en la etapa publicitaria que en el filme del mismo nombre, que al final de cuentas va a pasar a ser olvidada, creo yo.

Espero que en futuras producciones se regrese a la esencia del este género cinematográfico, que se creen piezas del calibre del Poltergeist, Él Bebe de Rosemary, o la maldición.



¡Les deseo que pasen un buen Halloween y día de muertos!

Un filme de criticar por criticar...

Uno de los estrenos cinematográficos más reciente es “La Dictadura Perfecta”, un filme mexicano realizado por Luis Estrada. En la cinta aparecen personalidades como Damián Alcázar, Joaquín Cosío, Alfonso Herrera, Dagoberto Gama, María Rojo y Salvador Sánchez. La trama nos cuenta como una televisora, a través de uno de sus empleados, se encarga de promover candidaturas o tópicos en la mente de todos los mexicanos. Es una clara referencia a las polémicas que se han hecho acerca de la elección del 2012.

Fui con la mente abierta a ver esta película, dispuesto a recibir toda clase de bombardeos izquierdistas. Yo sabía con antelación que esto iba a ser, más que crítica, un conjunto de reclamos para el gobierno y Televisa; hasta aquí todo bien porque el arte no tiene que ser ético, sino estético.

Un problema que encuentro en la película es que no se sabe en qué sentido va contada, en ocasiones parece una parodia, luego se ponen en un plan realístico, y luego en otros que hacen que todo pierda coherencia. 

Cuenta con un elenco bastante reconocido en el ambiente cinematográfico mexicano, pero creo que nadie logra su máximo. Los personajes son un poco planos ¿a qué se debe esto? ¿Temor de que los parodiados se sintieran ofendidos? El personaje de Alfonso Herrera es el más importante de la cinta, y creo que termina siendo el más gris entre todos los demás que lo rodean. 

La fotografía no fue mi favorita porque a pesar de que hay dinero invertido, todo se ve pequeño y barato. Considero que Estrada había logrado como una especie de cineasta transgresor y crítico del cine mexicano con su cinta “El Infierno”, pero algo no cuaja correctamente aquí. 

Durante toda la película se hace referencia a sucesos que se han presentado durante los últimos gobiernos federales, donde claramente se presenta el “lado oscuro” “la cara fea” de la política y la televisión. Creo que al momento de escribir el guion se sintieron revolucionarios o algo de ese estilo, pero la información que dan no es algo nuevo o trascendental, lo narrado en la película lo encuentro en internet con el simple hecho de buscar información al respecto.

La idea prometía ser algo interesante, que nos haría ver lo que no se nos había permitido ver, pero al final solo nos dicen lo que ya sabíamos. Y dejemos de lado el hecho de que la historia es algo trillado y comentado desde hace ya tiempo, la realización del filme no está bien llevado, esto parecía una serie televisiva de esas que televisa se avienta de repente, no sentí que estuviera viendo una película de gran calidad y que narraba una historia política de buena manera.

Muchos me tachan de malinchista, pero no es que yo vea de menos al cine mexicano, simplemente creo que la industria cinematográfica de este país sufre de grandes carencias y no es sólida. En ocasiones he pensado en que no es correcto comparar las producciones mexicanas con las de Estados Unidos, pero al final de cuentas me cuesta lo mismo entrar a ver una película mexicana que entrar a ver una gringa.

Sé que varios quieren ir a ver esta película, yo no los freno ni se las prohíbo, esta es solo una opinión de tantas que puede haber. Pero solo les advierto que no vayan esperando ver una obra transgresora del siglo XXI. Mejor vayan esperando algo como “La Hora Pico” o “La Familia P.Luche”, si van en ese plan la van a disfrutar mucho.

Les falto el doble de creatividad...

Este viernes llego a su final el programa de televisión “Soy tu Doble” que era transmitido por El Trece de Televisión Azteca. El espectáculo era un programa de imitaciones, donde algunos famosos concursaban emulando actuaciones de cantantes tanto nacionales como internacionales.

Los concursantes en este tipo de concursos siempre son personalidades que no tienen demasiada importancia en la industria. Tuvimos a talentos como Lupita Sandoval, una cómica que tuvo su mayor éxito en el programa “Cachun Cachun Ra Ra”; Maria Karuna, ex integrante del grupo “Calo”; Chao, cantante de muy bajo perfil; entre otros “famosos”, incluidos unos 10 ex académicos. El elenco dejo mucho que desear porque a diferencia de “Tu Cara Me Suena” en España y Argentina, aquí no había personalidades que verdaderamente llamaran la atención, no eran figuras importantes de Azteca, es más, no eran ni de la “Lista B”.

En el panel de jueces estuvieron personalidades que, considero, tampoco tenían nada que hacer ahí. Empezando por Niurka ¿Qué sabe ella sobre imitar? ¿Puede dar alguna crítica objetiva? No, pero al final les importa causar morbo; pero al final su participación termino siendo algo gris. Por otro lado estaba Cynthia Rodríguez, ¿Quién es Cynthia? Una cantante egresada de La Academia y que le ha entrado también a la actuación. Lleva 10 años de carrera y hasta la fecha no hay conseguido éxito importante a pesar de que la televisora la pone hasta en la sopa. Sus comentarios no aportaron nada a la competencia, su perfil era el de ser amable pero llegaban ocasiones en las que más que amable parecía algo retrasada e ingenua. 

La parte masculina del jurado contaba con la presencia de un bloggero/comediante/stand-upero/maistro/cajero/limonesnero/etc. El nombre del antes mencionado era “Ese Wey”, si, así como lo lee; a este sujeto lo invitaron para traer algo popular del internet, un toque de lo que está de moda, pero hubo un problema: el hombre jamás pudo agarrar el ritmo a la forma de trabajar en TV y solo nos daba una serie de comentarios muy desangelados con pretensión de ser graciosos pero que terminaban siendo de pena ajena. Considero que, de los cuatro jueves que había, él era el que salía sobrando. El lado “malo” del panel estuvo a cargo de Héctor Martínez, quien es alguien muy metido en la industria y que todos conocimos como director de la primera generación de “La Academia”. De principio a fin cumplió con el perfil de ser el más temido, pero al mismo tiempo llegó a ser absurdo, pues había ocasiones en las que era por demás su actuación 

Desde el principio se notó el favoritismo de la producción hacía ciertos concursantes. Otro problema fueron las caracterizaciones, a pesar de hacer el intento, hubo ocasiones en las que los personajes en lugar de parecer un doble, parecían una burla. Hubo momentos en los que si se logró llegar a personificar a ciertas figuras, pero hubo otros en los que no y que nos dejaban un mal sabor de boca.

La empresa aposto en esta ocasión por transmitir un reality show de lunes a viernes a las 7 de la noche. Algo que podría ser interesante, pues en ese horario no encontramos más que telenovelas en la mayoría de los canales, y algo así parecía ser una bocanada de aire puro. El problema fue que para el público seguidor de este programa se volvía algo aburrido y tedioso pues el programa debía completar 5 horas de duración a la semana y el ritmo del programa llegaba a caer. Lo ideal hubiera sido que se transmitiera los sábados o domingos en 2 o 3 horas. 

Dudo mucho que Azteca vuelva a hacer algo de este tipo, es el segundo programa de imitaciones por el que apuestan y que no les funciona de la manera esperada. Aunque creo que los errores, fueron en sus mayoría, de parte de la parte creativa y de producción, que no supo llevar a cabo el programa. Falto un elenco más decente de concursantes, un panel de jurados verdaderamente carismáticos y con peso, falto mejor horario y falto mejor productor. ¡Ups! Lo dije.

Gone Girl, una historia que no debe perderse.

Este fin de semana se estrenó en cartelera la película “Perdida (Gone Girl)” que es dirigida por David Fincher (The Social Network, Fight Club, Panic Room, etc.) y es protagonizada por Rosamund Pike y Ben Affleck. La historia cuenta como un matrimonio sufre un problema cuando la mujer desaparece el día de su quinto aniversario, y todo lo relacionado con la búsqueda de ésta por parte de la policía, los familiares y los medios de comunicación.

La trama se encarga de dar ciertos giros que te mantienen sentado a tu butaca sin parpadear; la forma en la que presentan a los personajes es muy interesante porque logran cambiarte la perspectiva que tienes de cada uno de ellos conforme va avanzado la película.

Los actores cumplen perfectamente con el propósito y sostienen la cinta de principio a fin. Fincher, logra que embonen perfectamente todos los elementos que componen este trabajo cinematográfico. Ben Affleck reafirma que tiene mucho que ofrecer a la industria así como lo hizo el año antepasado con Argo; su personaje es un estuche de sorpresas, puesto que hay momentos en que lo adoras y otras en que lo odias, pero todo depende de los contextos y distintas cosas que la película te va haciendo saber. Rosamund Pike juega con nuestras emociones, entrega un papel bien ejecutado y nos hace sentir cosas mientras apreciamos la cinta. 

Pero no tendríamos esta pieza cinematográfica si no fuera por el libro que Gillian Flynn escribió en el 2012. La manera en que nos narras las cosas y cambian de tiempos y momentos es increíble, logran meternos en la trama a cada momento y ni nos dejan parpadear.

Yo los invito a que vayan a ver este filme que ya está en carteleras, van a pasar un rato muy agradable con esta película que nos hace subir a una montaña rusa de emociones y donde podemos incluso reflejarnos con ciertas actitudes.

¡2 de Octubre no se olvida!

Como cada año, en esta fecha recordamos un suceso que indigno a la comunicad, no solo estudiantil, sino en general. El 2 de Octubre de 1968 ocurrió una de las tragedias que más conmocionaron a los mexicanos y que hasta la fecha nadie ha salido a pedir disculpas por el hecho sucedido.

En el marco de esta conmemoración, quiero hablar el día de hoy acerca del filme “Tlatelolco, verano del 68”, filme lanzado en el 2012 donde se cuenta la historia amorosa de una pareja de jóvenes de distintas clases sociales que luchan por su amor a pesar de la represión que vive la parte femenina en su casa y a los problemas sociales que enfrentan los estudiantes en ese momento.

Lo interesante de esta trama es la contextualización que tiene, el momento histórico que se vivía en esos momentos. La película muestra a un gobierno tirano, represor, menospreciativo, etc. El cuadro presentado no es una película más de acción o de drama, la cinta está basado en un hecho real, en algo que ocasiono cientos de muertes, espero que hasta este punto vayan conmigo. 

Que sucede, que en este filme se habla mucho pero no se habla todo; se agradece que en esta ocasión se den nombres y razones, pero hay cosas en la película que creo quedan sueltas o ambiguas. 

Pero debo decir que de manera inteligente se coloca la forma de vida social de esa época con los aspectos sociales; la represión que había no solo en las calles, sino también en los hogares mexicanos del país. 

Creo que es necesario que el cine mexicana haga más filmes como estos, que busque una identidad propia, no es necesario emular a Hollywood; eso es lo que Francia y la India entendieron, que el secreto estaba en hacer cosas con un estilo propio. 

México debe hacer debe hacer cine donde muestre las problemáticas y tipos de vida del mexicano, porque debemos reconocer nuestros errores, y si no lo hacemos en el día a día, que sea por lo menos en la pantalla.

Aplaudo este filme y, más que nada, por la temática que se atrevieron a tocar. Espero que como este vengan más y más producciones; ya tuvimos Colosio y próximamente un fenómeno social interesante, el de Gloria Trevi. 

Culmino este texto diciendo: 2 de Octubre No se Olvida.