Uno de los estrenos cinematográficos más reciente es “La Dictadura Perfecta”, un filme mexicano realizado por Luis Estrada. En la cinta aparecen personalidades como Damián Alcázar, Joaquín Cosío, Alfonso Herrera, Dagoberto Gama, María Rojo y Salvador Sánchez. La trama nos cuenta como una televisora, a través de uno de sus empleados, se encarga de promover candidaturas o tópicos en la mente de todos los mexicanos. Es una clara referencia a las polémicas que se han hecho acerca de la elección del 2012.
Fui con la mente abierta a ver esta película, dispuesto a recibir toda clase de bombardeos izquierdistas. Yo sabía con antelación que esto iba a ser, más que crítica, un conjunto de reclamos para el gobierno y Televisa; hasta aquí todo bien porque el arte no tiene que ser ético, sino estético.
Un problema que encuentro en la película es que no se sabe en qué sentido va contada, en ocasiones parece una parodia, luego se ponen en un plan realístico, y luego en otros que hacen que todo pierda coherencia.
Cuenta con un elenco bastante reconocido en el ambiente cinematográfico mexicano, pero creo que nadie logra su máximo. Los personajes son un poco planos ¿a qué se debe esto? ¿Temor de que los parodiados se sintieran ofendidos? El personaje de Alfonso Herrera es el más importante de la cinta, y creo que termina siendo el más gris entre todos los demás que lo rodean.
La fotografía no fue mi favorita porque a pesar de que hay dinero invertido, todo se ve pequeño y barato. Considero que Estrada había logrado como una especie de cineasta transgresor y crítico del cine mexicano con su cinta “El Infierno”, pero algo no cuaja correctamente aquí.
Durante toda la película se hace referencia a sucesos que se han presentado durante los últimos gobiernos federales, donde claramente se presenta el “lado oscuro” “la cara fea” de la política y la televisión. Creo que al momento de escribir el guion se sintieron revolucionarios o algo de ese estilo, pero la información que dan no es algo nuevo o trascendental, lo narrado en la película lo encuentro en internet con el simple hecho de buscar información al respecto.
La idea prometía ser algo interesante, que nos haría ver lo que no se nos había permitido ver, pero al final solo nos dicen lo que ya sabíamos. Y dejemos de lado el hecho de que la historia es algo trillado y comentado desde hace ya tiempo, la realización del filme no está bien llevado, esto parecía una serie televisiva de esas que televisa se avienta de repente, no sentí que estuviera viendo una película de gran calidad y que narraba una historia política de buena manera.
Muchos me tachan de malinchista, pero no es que yo vea de menos al cine mexicano, simplemente creo que la industria cinematográfica de este país sufre de grandes carencias y no es sólida. En ocasiones he pensado en que no es correcto comparar las producciones mexicanas con las de Estados Unidos, pero al final de cuentas me cuesta lo mismo entrar a ver una película mexicana que entrar a ver una gringa.
Sé que varios quieren ir a ver esta película, yo no los freno ni se las prohíbo, esta es solo una opinión de tantas que puede haber. Pero solo les advierto que no vayan esperando ver una obra transgresora del siglo XXI. Mejor vayan esperando algo como “La Hora Pico” o “La Familia P.Luche”, si van en ese plan la van a disfrutar mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario